La apuesta internacional de González Byass, que en el ejercicio 2020 representó el 73% de las ventas, ha permitido mitigar el impacto en su facturación bruta, que desciende un 9,5%, y alcanzar un Ebitda de 20,7 millones de euros.
La rápida reacción del equipo directivo, el uso óptimo de la tecnología, así como la diversificación geográfica y de negocios de González Byass han permitido situar la facturación bruta de esta Familia de Vino y Spirits en los 279,6 millones de euros, un 9,5% menos respecto del año anterior. La facturación neta ha sido de 216,4 millones de euros, con un descenso similar. Al cierre del ejercicio 2020 (el ejercicio fiscal va del 1 de septiembre de 2019 al 31 de agosto de 2020), el Ebitda de la compañía ha alcanzado los 20,7 millones de euros, frente a los 28,4 de 2019.
Tras un decenio de crecimiento continuado, la facturación de González Byass se ha visto afectada en aquellos mercados donde el canal de hostelería cuenta con un mayor peso, como es el caso de España, aunque amortiguada por el buen comportamiento de las ventas en el exterior, que suponen un 73% del negocio total. A pesar de este escenario, las distribuidoras propias (Iberia, Estados Unidos, México y Reino Unido) han sido todas rentables en sus resultados consolidados. Además, los canales de alimentación y online han crecido significativamente, especialmente en el Reino Unido, mercado en el que el negocio ha aumentado a doble dígito.
Más cerca de su entorno
González Byass ha puesto en marcha acciones para el desarrollo de las comunidades locales y el incremento del bienestar de las personas que en ellas conviven. En esta línea, en el mes de abril de 2020, comenzó a fabricar y distribuir más de 55.000 litros de gel hidroalcohólico, que han sido destinados a hospitales, residencias, comedores sociales, centros de la Cruz Roja y establecimientos de restauración en todo el territorio nacional.
Otras acciones solidarias llevadas a cabo han sido la donación de los ingresos generados por la saca 2020 de Tío Pepe en Rama, lanzada en plena pandemia para apoyar a la hostelería en España y Reino Unido; el apoyo a la hostelería de las regiones en las que se ubican las bodegas y viñedos del grupo ofreciéndoles formación y digitalizando sus cartas; la cesión de las instalaciones de Jerez a restauradores de la zona durante el verano para que pudiesen ofrecer sus servicios al aire libre, minimizando los riesgos de contagio de la Covid-19, así como la organización de visitas gratuitas a las bodegas de Vilarnau y Viñas del Vero para los profesionales sanitarios y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Mirada al futuro
González Byass ha continuado impulsando los proyectos de largo recorrido iniciados en los últimos años. Destaca la finalización de la nueva bodega de Beronia en la D.O.Ca. Rioja y la inauguración del Hotel Bodega Tío Pepe en Jerez de la Frontera, el primer Sherry Hotel del mundo.
El compromiso sostenible “5+5 Cuidando el Planeta” se ha ampliado con el uso de seis energías renovables (fotovoltaica, geotermia, hidrógeno verde, biomasa, térmica solar y aerotermia) que representarán entre el 25 y 60% de la energía consumida en seis de sus bodegas. Además, González Byass se ha adherido al Pacto Mundial de Naciones Unidas, comprometiéndose a priorizar los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): educación de calidad, trabajo y crecimiento económico, acción por el clima y vida en la tierra.
Mejor Familia de Vino del Año
Los premios “Excellence in Wine and Spirits”, organizados por la publicación alemana Meininger, han otorgado a González Byass el título de “Mejor Familia de Vino del Año”. Esta mención reconoce la labor de una compañía que, en manos de la quinta generación, mantiene viva la esencia de su fundador.